Hablar de "SONRISAS Y LÁGRIMAS", es como hablar de un cuento de hadas donde los buenos siempre salen victoriosos y las princesas se casan con los príncipes.. y los príncipes con las princesas. Un día, mi padre me dijo: "Vamos a ver una película musical que han estrenado en el Cine Rex". Mi primer pensamiento fue: ¿qué será?. Me senté en mi butaca esperando ver un musical como muchos. Conocía la historia de la Familia Trapp por libros y por películas anteriores, incluso en blanco y negro. Cuando comenzó la proyección y comencé a ver esos paisajes tan conocidos por mí, porque he estado en Salzburgo, y vi en la lejanía correr hacia nosotros a Julie Andrews, comencé a sentir algo muy distinto a otras veces que había estado en el cine. La música, el paisaje, ella con su traje de monja novicia y perdiendo el pañuelo por los prados.. me enganchó. Puedo prometer y prometo que cuando terminó la película le dije a mi padre: "Gracias papá, me has traído a ver la película de mis sueños". Y así fue. Volví a verla igual veinte veces. Tanto es así, que cuando la pusieron en otro cine, volví a verla esta vez con una libreta donde fui apuntando el diálogo (yo tenía que hacer ese musical en el teatro, pero sin perderme una palabra). Me compré el vídeo, que fue el primero que entró en mi casa, y comencé a escribir y a escribir. Conseguí grabar con mi voz todas las canciones de la película y llegó el momento de estrenarlo en el Teatro Principal de Zaragoza, haciendo con ello realidad el sueño de mi vida. Yo, encarnando a Julie Andrews, la artista que junto a Natalie Wood han sido mis preferidas. Esta película obtuvo diez nominaciones para el Oscar de Wollywood, siendo premiada con cinco: Mejor película (Robert Wise), mejor director (Robert Wise) -significar que Wise, ya había sido premiado cuatro años antes por "West Side Story"- , mejor banda sonora adaptada de otro medio (Irwin Kostal), mejor montaje (William H. Reynolds), y mejor sonido (James P. Corcoran y Fred Haynes). Pero no podemos olvidar los excelentes temas musicales de Richard Rodgers y Oscar Hammerstein; la excelente fotografía de Ted McCord y las inolvidables interpretaciones de: Julie Andrews, Christopher Plummer y Eleanor Parker. Hasta la propia Baronesa Von Trapp intervino en una secuencia de la película haciendo de extra en el mercado (tanto era su afán de conocer a Julie Andrews). La actuación completísima de los siete niños del Barón: Lizel, Friddy, Luisa, Kurt, Brigitte, Marta y la pequeña Grettel. Esa Baronesa, mala donde las haya, pero tan bien interpretada. El tío Max, incluso el cartero, que quiere ser novio de la hija mayor del Barón Trapp y luego se vuelve contra él por sus tendencias políticas. Hasta el mayordomo tiene un papel muy relevante al final de la película, y esa ama de llaves con esa sorna de persona que sabe positivamente cómo es el Barón en realidad. Yo siempre he pensado que Georg Ritter Von Trapp, empezó a sentir atracción hacia María nada más verla con ese traje anticuado y horroroso y esa pamela que verdaderamente no le favorecía nada. Los niños, siempre firmes al oír el silbato de su padre, poco a poco van sintiendo cariño hacia froilan María. La escena del agua es graciosísima y muy bien llevada, sobre todo en la expresión de la Baronesa, expresión de risa cuando los ve salir del agua y contemplar a Von Trapp con esa cara de pocos amigos. Ahí se ve positivamente que los papeles ya los ha perdido con sus hijos, y que María ha entrado en su corazón. Recordar la inolvidable escena cuando canta "Edelweiss" mirando hacia María y ahí la Baronesa comprende que si no pone cartas en el asunto, se queda sin Barón, como así es. En fin, ¡cuánto hablaría de esta gran película que muchos tacharon de remilgada y soporífera!, incluso de cursi. Pienso que de vez en cuando, hay que hacer películas así que hacen te relajes cuando te sientas en la butaca y pienses que estás viendo algo muy grande. Buenos actores, excelente música, bellos paisajes y, sobre todo, "THE SOUND OF MUSIC" ha sido y será la mejor película musical para todos los públicos que se ha escrito al menos para una servidora. Gracias.
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